1. Planifica bien y con antelación qué stands vas a visitar, ya que el tiempo es limitado y el aforo es enorme. Además, recuerda que la Feria es un lugar de encuentro para conocer contactos más que para concretar operaciones.
2. Contrata un intérprete o guía. Es evidente que la barrera lingüística puede ocasionar malentendidos, por lo que siempre es necesario acompañarse de un buen profesional.
3. Ten en cuenta las diferencias culturales y prepárate a conciencia: saludar siempre a la persona de mayor rango o edad, recoger la tarjeta de presentación que
te ofrecen con las dos manos y no meterla rápidamente en el bolsillo o evitar temas políticos en las conversaciones son algunos de los factores que debemos
tener en cuenta cuando estemos tratando con comerciantes chinos.
4. Sé amable y sonríe mucho. Parece una tontería pero ante falta de comunicación verbal, la comunicación gestual puede ayudar en los negocios y mucho.
5. La unión hace la fuerza. Únete a otros empresarios cuando estés visitando la feria, ya que los comerciantes chinos suelen ser más atentos cuando ven a un
grupo llegar que cuando va una sola persona al stand.